Decepción es la palabra que define la jornada de ayer del Festival de Venecia. Ninguna de las películas que pudieron verse llamaron especialmente la atención ni de la crítica ni del público.
Empezamos con "The exchange", la nueva película del israelí Eran Kolirin. La cinta trata sobre un hombre que decide tomar riesgos en su vida y pasar de una vida ordenada a una un tanto más alocada.
La película ha pasado con división de opiniones por el Festival y lo mismo se han oído aplausos como abucheos.
La segunda cinta en presentarse fue "Quando la Notte" de la directora Cristina Comencini y que trata sobre un hombre que cambia su opinión sobre las mujeres debido al abandono de su madre y tras conocer a una mujer en sus vacaciones.
La crítica la ha abucheado y la ha dejado por los suelos. No ha gustado nada de nada.
El plato fuerte era Abel Ferrara, que presentaba una visión apocalíptica del futuro en su película "4:44 last day on earth", protagonizada por Willem Dafoe.
Ha sido la gran decepción de la jornada, porque no queda rastro del director provocador de anteriores obras. La crítica ha salido con la sensación de que se esperaba más.
Otra cinta que decepcionó fue la española "EVA", de Kike Maíllo. La película ha dejado indiferente a los que la han visto y no parece que vaya a ser la sensación que se creía que sería.
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