Para aquellos que no sepan, Alexander Litvinenko fue un ex espía ruso que acusó al mismísomo Vladimir Putin de haberle envenenado.
Desde luego, es una historia de lo más cinematográfica y a Warner no se le ha escapado la oportunidad de trasladarla al cine.
Por ese motivo, está preparando una versión sobre los hechos y para protagonizar la cinta ha pensado en el actor más ocupado del momento: Michael Fassbender.
Pero ahí no queda la cosa, ya que para dirijir semejante proyecto, el director escojido es Rupert Wyatt, un director que de golpe y porrazo se ha convertido en uno de los más solicitados de Hollywood.
Sin duda alguna, es una de esas películas que, aunque sólo sea por el material en el que se basa, merece la pena ser vista.
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