El Festival de Venecia ha llegado al ecuador de esta edición y la verdad es que a estas alturas ya no le importa a nadie. Todo el mundo se ha pirado a Toronto, que empieza mañana y que se ha convertido en la referencia de los estudios a la hora de testar sus cintas con posibilidades a premios.
Algo tendrá que hacer la organización de Venecia si quiere permanecer como un evento de importancia mundial. lo cierto es que empezó bastante bien, pero en los últimos días se ha ido desinflando cada vez más.
Hoy se ha presentado "A pigeon sat on a branch reflecting on existence", del realizador Roy Andersson con un fuerte aplauso por parte de la crítica. la cinta es una reflexión sobre la vida y la muerte usando a una pareja de vendedores ambulantes como centro de la narración. Se habla de que es la máxima candidata al León de Oro, y digo yo que con este tipo de propuestas, tan alejadas del gusto popular, no sé si el Festival se está haciendo un flaco favor.
La otra cinta presentada a concurso fue "Nobi (Fires on the plain)" de Shinya Tsukamoto y quetambién ha gustado mucho a la prensa especializada. En este caso la historia se basa en una novela de Ooka Shohei y trata sobre un soldado enfermo enfermo de tuberculosis destinado en Filipinas durante la II Guerra Mundial.
Mañana seguiremos con el Festival,q ue segro que aún hay más guerras por ver.
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