Después de dejar la franquicia de 007, Pierce Brosnan, una vez afianzado como estrella en el cine, ha ido elegiendo trabajos cada vez más arriesgados en los que ha podio demostrar su talento y su verstailidad como actor.
Ahora tendrá una nueva oportunidad con "Last man out", adaptación de la novela de Stuart Neville que en España se tituló como "Los fantasmas de Belfast", aunque su título original era "The twelve".
La historia trata sobre un pistolero del IRA que acaba de salir de la cárcel viendo que la paz se ha instalado en Irlanda del Norte. Pese a eso, su alma está atormentada por los fantasmas de la gente que asesinó y que le dictan que para poder vivir en paz consigo mismo debe matar a un político republicano. Una vez echo ese "encargo", decide acabar con sus antiguos compañeros de armas para poder reconciliarse, pero el Gobierno británico no parece dispuesto a que la violencia vuelva a desatarse en Irlanda y encargan a un agente secreto que detenga al responsable de los asesinatos.
Un poco enrevesado todo, pero bastante interesante. Además, es un personaje bombón para Brosnan, si se hace bien, claro y no derivan la historia a la típica cinta de acción.
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